El estiramiento


Los estiramientos deben realizarse después de hacer ejercicios o antes de los ejercicios, después de por lo menos 5-10 minutos de calentamiento. 

Es muy importante prestar atención al correcto alineamiento del cuerpo para obtener resultados más efectivos. 
Se pueden hacer diariamente o por lo menos tres veces por semana. Mantén cada estiramiento por 15-30 segundos aproximadamente. 
Repite cada estiramiento de 3-4 veces. 
Evita los puntos en los que se sienta dolor. 
El estiramiento se debe sentir en el centro del músculo no en las articulaciones. 
Los movimientos deben ser lentos, exhalando cada vez que nos estiramos y luego respirando normalmente. 
Para los muslos:
Siéntate en el piso con las piernas extendidas, dobla una de las piernas hasta que el talón toque el muslo de la pierna opuesta. 
Estira los brazos hacia la pierna extendida y trata de pegar el pecho contra el muslo, manteniendo la vista hacia el pie.
Repite con la otra pierna.
Para las caderas y la parte inferior de la espalda: 
Acuéstate en el piso y dobla ambas rodillas hacia el pecho, manteniendo las manos detrás de los muslos. 
Repite con la otra pierna. 
Acuéstate en el piso y dobla la rodilla de una de las piernas hacia el pecho, manteniendo las manos detrás del muslo. 
Repite con la otra pierna. 
Siéntate en el piso con ambas piernas rectas hacia el frente. 
Estira el brazo derecho por detrás de la cadera y apoya la mano en el piso. 
Cruza la pierna derecha sobre la izquierda y estira el brazo izquierdo hacia la pierna derecha.
Coloca la rodilla derecha por detrás del codo izquierdo. 
Exhala y presiona contra la rodilla mirando sobre el hombro derecho. 
Repite con el otro lado.  
Para el cuello: 
Manteniendo los hombros derechos, dobla lentamente el cuello hacia la derecha y hacia la izquierda tratando de tocar el hombro con la oreja, exhalando en cada estiramiento. 
Para los brazos, hombros y parte superior de la espalda: 
Eleva un brazo sobre la cabeza y recuéstalo sobre la oreja. 
Dobla el codo de manera que la mano caiga detrás de la cabeza.
Con la mano opuesta, agarra el codo del brazo doblado, empujándolo lentamente hacia detrás de la cabeza. 
Manteniendo los hombros derechos, colocar los brazos hacia atras y hacia abajo. 
Entrelaza los dedos con las palmas de las manos hacia fuera y estíralos lo más que puedas hacia fuera. 
Manteniendo los hombros derechos, colocar ambos brazos hacia el frente. 
Entrelaza los dedos con las palmas de las manos hacia fuera y empújalos ligeramente hacia adelante. 
Arrodíllate en el suelo, extendiendo el torso y los brazos hacia el frente. 
Acerca el pecho hacia el suelo. 
Exhala y presiona los brazos hacia el suelo para extender los hombros.