Crear un plan de juego

Durante un partido de squash hay poco tiempo para pensar, así que deberá pensar antes de entrar a la cancha. Este será su plan de juego. Debe practicar durante sus sesiones y partidos de entrenamiento y disciplinarse a fin de apegarse a este plan durante el match. Pero también deberá saber cuándo cambiarlo, en caso de que no funcione. 
Mi plan de juego es simple. Quiero a mis oponentes en las esquinas del fondo y quiero mantenerme en la T. Cuatro tácticas de juego básicas:

a) Longitud.

b) Llegar temprano a la pelota.

c) Controlar la T y estar atento.

d) Aprovechar las oportunidades para atacar.

Para ubicar a mi oponente en las esquinas del fondo de la cancha golpeo pelotas bajas y fuertes para que no puedan interceptarlas y se vean obligados a retroceder para llegar al a pelota. Golpeo de manera plana con un poco de efecto para ayudar a que la pelota se mantenga en el fondo. 

Mis puntos fuertes son llegar temprano a la pelota, golpear con una buena longitud y lograr que mis oponentes tengan dificultad en alcanzarlas. Esto los obliga más a concentrarse en detenerme que en poder continuar con su juego. 

Aplicar este tipo de presión me brinda oportunidades para atacar. Mis tácticas son ubicar la pelota en el fondo, hacer que mi contrincante se estire continuamente – forzándolo a devolver pelotas débiles o realizar errores de táctica. Luego puedo atacar o volver a enviar a mi oponente a las esquinas del fondo. 

Este es el patrón de rally: Primero inicio el rally con longitud, aplico presión al oponente y busco oportunidades para atacar. Un sólo ataque puede no ser suficiente pero, en estos casos, no me irrito ni pierdo mi disciplina de táctica cuando devuelven la pelota. Simplemente vuelvo a jugar el rally y trato de aprovechar la siguiente oportunidad.